Terapia fágica e infecciones urinarias

Tratamiento de una infección del tracto urinario mediante terapia fágica

Durante la primera semana, los pacientes tienen reuniones diarias con los médicos. Todos los especialistas médicos necesarios, como urólogos, ginecólogos, especialistas en enfermedades infecciosas, neurólogos, etc., se reúnen para estas consultas. Estas consultas médicas son muy completas y pueden durar más de una hora. Además de tratar la condición diagnosticada, los médicos intentan comprender la causa subyacente y la salud general del paciente. El objetivo es proporcionar la atención más completa posible.

Los médicos prescribirán entonces pruebas diagnósticas exhaustivas.

- Examen físico completo
- Ecografía y radiografía
- Pruebas bacteriológicas urinarias y vaginales
- Otras pruebas diagnósticas según se considere necesario.

Tras estos análisis, los médicos podrán establecer el protocolo de tratamiento.

- Ingesta de fagos específicos que apuntan a la infección bacteriana del paciente, dos veces al día por vía oral.
- Instilación uretral realizada por el ginecólogo.
- Supositorios rectales que contienen fagos.
- Uso de supositorios vaginales infusionados con fagos.
- Otras modalidades de tratamiento según determinen los médicos.

Después de una semana de tratamiento, los médicos realizan nuevos análisis para asegurar un progreso positivo en el tratamiento.
A su regreso, los pacientes continúan el tratamiento oral durante un mes. Es importante que los pacientes se sometan a análisis adicionales para confirmar la esterilidad de su orina. En algunos casos, puede ser necesario un tratamiento adicional con fagos para erradicar completamente la infección.

La Sra. F.D., una bióloga jubilada que vino a Georgia para tratar una infección urinaria bacteriana multirresistente, ofrece un relato claro de sus experiencias con la terapia fágica y Georgia. Haga clic en el siguiente enlace para encontrar su testimonio: Página de Testimonios.

Debe tenerse en cuenta que en casos de prostatitis (infección de la próstata), el tratamiento puede tardar más tiempo ya que la próstata es difícil de alcanzar para los fagos (similar a los antibióticos).

¿Cuáles son los síntomas de una infección del tracto urinario?

Una infección del tracto urinario es una infección en cualquier parte del sistema urinario, incluyendo los riñones, el tracto urinario, la vejiga y la uretra. La mayoría de las infecciones ocurren en el tracto urinario inferior, específicamente en la vejiga y la uretra.

Los principales síntomas son:
- Fuerte y constante necesidad de orinar.
- Brennen beim Urinieren.
- Miccion frecuente en pequeñas cantidades.
- Orina maloliente y turbia.
- Orina que aparece roja, rosa brillante o de color cola, indicando sangre en la orina.
- Dolor pélvico, especialmente en el centro de la pelvis en mujeres.

La terapia fágica puede ser muy efectiva en ciertas condiciones y ofrece ventajas únicas en comparación con los antibióticos. Los cócteles de fagos ayudan a preservar la flora intestinal normal del cuerpo, evitando daños. El éxito de la terapia fágica también depende del sistema inmunológico del paciente, la presencia de diabetes, la salud general del paciente y el tipo de bacteria involucrada. Es importante tener en cuenta que no todas las infecciones bacterianas pueden ser tratadas con terapia fágica. Puedes consultar la página ¿Qué trata la terapia fágica? para ver una lista de bacterias que pueden ser objetivo de la terapia fágica.

¿Qué pacientes son elegibles para el tratamiento con terapia fágica?

Hasta la fecha, el mundo occidental se basa principalmente en tratamientos con antibióticos para las infecciones del tracto urinario. Cabe señalar que Clinical Infectious Diseases, una renombrada referencia británica en el cuidado de la salud, ya menciona el uso de bacteriófagos en el tratamiento de las infecciones del tracto urinario (ITU). Puede hacer clic en el siguiente enlace para obtener más información. Clinical Infectious Diseases - Infecciones del Tracto Urinario y Bacteriófagos?

Sin embargo, ¿cómo pueden tratarse las personas que tienen fracasos terapéuticos con antibióticos o que son intolerantes a los antibióticos? Estos pacientes pueden beneficiarse enormemente de la terapia fágica, que a veces puede ser la única opción efectiva. Los antibióticos y los bacteriófagos también pueden usarse en combinación. Los bacteriófagos también se utilizan para prevenir la recurrencia de infecciones del tracto urinario. Este enfoque es particularmente beneficioso para las personas con sistemas inmunológicos debilitados o alergias, ya que tienen un mayor riesgo de contraer otra infección.